«A tumba abierta», una obra para antropólogos, fumetas y demás curiosos

Publicado el 16 Marzo 2015 por Miguel Castejón en barcelonacannabica.com



La presentación de A tumba abierta en Barcelona (fotografía: Miguel Castejón )
Presentación de «A tumba abierta» en La Central del Raval (Barcelona) el 11.03.2015  (fotografía: Miguel Castejón )







La noticia de que reaparezca este libro es emocionante" dice Manuel Delgado al empezar la presentación del libro. Para los que no le conocen han de saber que Delgado es una referencia de la antropología más activa y crítica del país, y una figura local casi omnipresente en Barcelona. Habla del libro que ha ido a presentar: A tumba abierta, Autobiografía de un grifota; la historia de un notable personaje de la Barcelona más marginal de entre los 40 y los 70. El autor del libro es Oriol Romaní, antropólogo pionero en España en abrir esta disciplina al estudio de las drogas y la juventud. El libró se publicó por primera vez a principios de los 80. Ahora se reedita por tercera vez. La edición fue fue presentada el pasado jueves 12 de marzo en La Central del Raval en Barcelona por ambos antropólogos, compañeros de profesión y amigos.
La historia se relata, la vida de 'el Botas', es real. El testimonio del protagonista sirvió originalmente a Romaní como parte de su tesis doctoral sobre el hachís en la Barcelona de los años 60 y 70. El antropólogo decidió escribir la vida de 'el Botas' a partir del testimonio real de éste. La historia se cuenta tal y como lo haría el protagonista, en primera persona y con los vaivenes propios de la oralidad y la riqueza del léxico callejero de aquellos años. 'El Botas', legionario, rebelde, presidiario y drogata —para empezar—, explica sus múltiples trapicheos por el Barrio Chino de Barcelona y las peripecias de sus viajes por Marruecos y parte de Europa.
Entre el trabajo antropológico y la literatura, A tumba abierta, es una historia de la vida. Un testimonio de una época que al tiempo que proporciona la lectura fresca y divertida de una novela, tiene su valor como material etnográfico. Durante la presentación, Delgado reivindicó el libro como una referencia que debería servir para alentar a los alumnos a atreverse con las historias de la vida como método de estudio. "Es dar testimonio a una voz negada y supone un reconocimiento a la dignidad de personas que en muchos casos ni saben que la tienen" concluyó junto con Romaní.